El precio que pagamos por no perdonar

En este episodio te invito a pasearte por todos aquellos lugares incómodos, molestos o dolorosos que habitan en ti y que aun no han sido tocados con la luz del verdadero perdón.

Perdonar es no ofrecer resistencia a la vida, a lo que sucede en este momento.

Perdonar consiste en permitir que la vida te atraviese, te inunde, viva a través de ti y que se exprese completamente.

El verdadero perdón no perdona nada porque no hay nada que perdonar.

Todo resentimiento, toda resistencia que mantenemos en nuestra mente aviva el fuego del sufrimiento y no nos permite ser libres.

Perdonar consiste en un darnos cuenta de forma íntima y honesta que ya es momento de resignificar lo que sucedió, soltar el pasado y extraer de él la sabiduría que contiene, como una perla que sólo podemos descubrir en el momento en que cuestionamos el pensamiento en lugar de perdernos en él.

Cuando dejamos de tomarnos como algo personal lo que ocurre, podemos ir más allá de las apariencias, mirar con los ojos del corazón y extraer esa valiosa lección de vida que nuestra alma nos ofrece para nuestra máxima expansión de conciencia.

En este episodio te comparto cómo actúa este mecanismo mental del ego que nos atrapa en el no perdón alimentando nuestros dramas y cómo encontrar la salida para empezar a liberarnos de él.

Deseo que tu luz guíe e ilumine tu día.